Naturaleza y Experiencia, nuestra trascendencia

La creación e invención de un dios, es un error por parte de la humanidad. Más que provocar polémica o discusión, quiero fundamentar esto a partir de mis experiencias, que realmente es lo concreto y lo que vale, cada una de nuestras vivencias y momentos en está tierra y no en la “prometida”.

El gran error de la humanidad fue en su momento, dejar de tomar relevancia al hombre como sujeto de análisis y convocar, juntar y pegar a todos los dioses en uno solo. En este momento, dejamos de tener conciencia en lo concreto, la importancia de quienes nos rodean y de nuestra propia vida, así como de la propia naturaleza, nuestro fiel hogar.

Al creer en un dios que todo lo puede, dejamos de creernos capaces para llevar a cabo sueños, metas, tratando de darle una justificación a nuestros errores, nuestras acciones y nunca tratar de corregirlos, esperando que en una vida próxima junto a “dios”, podamos llevar una buena vida, una vida perfecta, posterior a la muerte.Para mí, la vida y la muerte tienen la misma importancia y no hay más que eso, es lo concreto, es de lo que me ha hablado la vida y muerte de amigos y familiares. Supeditar nuestros errores, nuestras acciones o simplemente acontecimientos importantes en nuestra vida o entorno, a la mano de dios y que él hace las cosas porque si, es uno de los errores más poderosos de la invención del “dios” y de la debilidad del hombre.

“dios”, nos hace débiles, la hora de caminar en la vida, nos hace sensibles para tratar de conseguir y luchar por las cosas que queremos, cosas que van mucho más allá de los “objetos”, sino que hace relación a nuestros deseos de vida, nuestros motivos de existencia, nuestros sentimientos hacia otras personas y la reciprocidad de estos.  No quiero desilusionar a ningún creyente en dios, solo quiero hacer hincapié, en que dios no tiene relación con nuestras acciones y nuestros errores, simplemente pasan por la debilidad o fortaleza mental que tenemos hacia ciertas instancias, es decir la convicción y la complementación que existe entre, mente y cuerpo hacia aquellos que tanto nos convoca, la naturaleza y la vida
.
Cuando el centro era el hombre, cada fundamento dado, era a partir de los concreto, por tanto la vida se interpretaba, como el regalo, como la instancia para realizar todo aquello que nos venia a la mente, es por esto que se destaco la ciencia en estos tiempos, y no así durante esté largo periodo de errores basados en un dios, que supuestamente mueve acciones,  mueve situaciones y mueve al propio humano y sus errores.

La materia o energía “no sea crea, ni se destruye, todo se transforma”, por tanto cada acción, secreta una enzima, cada muerte, emana energía, cada acción tiene un gasto calórico, así como provoca impulsos en nuestro entorno, es así como la fuerza del hombre trasciende la propia humanidad y la supuesta existencia de un dios, simplemente estamos supeditados a la naturaleza, fiel hogar por generaciones, que se impone ante nosotros, como nuestro medio y fin, es por esto que el hombre es susceptible a los cambios, tiene fácil adaptación ante este medio.

Lo tangible es lo siguiente:
El hombre nace y emana energía, que se ve reflejada en su entorno y en la misma compañía del hombre, todos sus acontecimientos y acciones están relacionados a su entorno, es decir, a las acciones anteriores, costumbres y condiciones de los padres y del propio medio inserto. La muerte por tanto, llega en momento impensados, que para mi, simplemente la naturaleza define, porque debe ocurrir así para mantener un equilibrio, otras muertes bastante confusas hacen creer que solo un dios puede determinarlo, pero más que eso es el propio error del hombre  y la poca consciencia y respeto que se tiene por sobre el otro. La energía que se secreta cuando una persona muere, se libera en el ambiente, y sinceramente para mi, esa energía se adhiere a la vida de las personas que conocieron a quien murió. ¿Por qué? Porque cuando muere tal persona, observamos la vida de otra forma, por las experiencias que tuvimos con esa persona, por sus ideas, sus emociones y sus acciones, lo que hace al hombre complementar su propia energía con la del contexto, y así generar una mejor persona. Esto ocurre con cada materia humana que deja de generar vida, solo se mantiene y modifica la energía que poseía este.
Por ende los sueños y metas, así como nuestras acciones, definen nuestra vida y la del entorno, puesto que quien experimenta junto a ti esto, adquiere energía distinta, así como el propio hecho de experimentar o vivenciar.

Nuestro aprendizaje y crecimiento se fundamenta en la incertidumbre de la naturaleza, es decir que este espacio fortalece nuestro crecimiento personal así como el conocimiento concreto de las cosas y el porque de lo que explica la ciencia y nuestra propia vida.

Lo concreto es el hombre y la naturaleza, estos dos como FIN y no como medio. Por tanto nacemos y morimos, dejamos de existir, no existe otra vida, y este es el único momento para poder disfrutar cada instante, para concretar sueños, crear lazos, equivocarnos, corregir, provocar cambios, así como fortalecer espacios, y nuestra propia vida, por medio de la mayor cantidad de experiencias posibles, eso es lo que trasciende, lo que nos hace inmortales y se ve reflejado en nuestro entorno, es decir, cuando dejemos de existir, lo que quedara en nuestros amigos, familiares o simple contexto serán nuestras acciones, pensamientos, emociones y formas de ver este momento en la tierra, eso hará que nuestro entorno, haga cambios en su vida, fortalezca sus opciones y  complemente su vida, con la de uno, y así crear la real humanidad que queremos, no con un vinculo en la naturaleza, si no que el hombre como naturaleza, como parte de esta y como fundamento para los demás.

La debilidad del hombre y sus errores, crean un dios, para dejar a la mano de la nada nuestras acciones y así fundamentar, SIN ARGUMENTOS nuestras acciones, dejando así de vivir y asumir nuestra responsabilidad como naturaleza, y por tanto provocamos un desequilibrio en nuestro entorno, por la debilidad de nuestra mente, que tiene poderes desconocidos y gigantescos.

Nuestras acciones y consecuencias, ocurren porque así lo decidimos, los errores, ocurren porque no somos perfectos y debemos corregirlos para mejorar, pero estos están supeditamos solo a nuestra mano, por poco conocimiento o simplemente por decisiones apresuradas (que nunca serán malas decisiones). Cada acción, tiene su consecuencia, tiene su aprendizaje y tiene su retroalimentación.

Somos naturaleza, somos parte de esta tierra, debemos aprovechar está vida, porque no existe otra después de la muerte, este es nuestro regalo y está es nuestra oportunidad, para crecer, desarrollarnos, experimentar, amar y VIVIR. Solo depende de ti y tu contexto, es decir TU NATURALEZA.


Disfruta lo que existe, El aquí y el ahora, no vivas de algo que nadie sabe si existe, porque no estamos capacitados para saberlo.

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